
El reconocido locutor de radio Pepe Domingo Castaño, quien falleció a los 80 años, dejó a su esposa María Teresa Vega y a sus dos hijos, Óscar y Hugo, un importante legado. Además de una sólida empresa y cuentas bancarias abultadas, les heredó un valioso patrimonio inmobiliario.
La familia vivía en una casa adosada de casi 300 metros cuadrados en la exclusiva zona de Aravaca, en Madrid. Pepe Domingo adquirió esta propiedad con las ganancias obtenidas por su éxito musical “Motivos”, que se mantuvo en el primer lugar de las listas de Hispanoamérica durante varias semanas.
Antes de comprar su casa de ensueño, la familia vivió en un piso en el Pinar de Chamartín. Además, cuando el locutor se separó de la presentadora María Luisa Seco, alquiló un piso en Arturo Soria. Con el tiempo, Pepe Domingo siguió invirtiendo en propiedades inmobiliarias y adquirió un lujoso piso en Marbella y dos apartamentos en Las Rozas.
En el año 2010, el locutor fundó la empresa Saudade Flavia S.L., dedicada a la representación de medios de comunicación. Aunque las últimas cuentas presentadas mostraron un resultado negativo, la empresa sigue activa y cuenta con la participación de la familia, siendo Pepe Domingo el accionista mayoritario, Hugo el administrador único, y María Teresa y Óscar, también accionistas.
Adicionalmente, la familia posee un 2,15% de las acciones de la aerolínea Plus Ultra, donde Hugo trabaja como piloto comercial.
Fuentes: El Confidencial