
En la skylines de importantes ciudades alrededor del mundo, personalidades como el arquitecto Miguel Rosales, inmigrante gay de Guatemala, han dejado una huella significativa a través de sus diseños de puentes. Para Rosales, los puentes tienen el poder de transformar y conectar comunidades. Su trabajo se centra en crear puentes que sean funcionales y estéticamente agradables.
Uno de los proyectos destacados de Rosales es el Puente Memorial Leonard P. Zakim Bunker Hill en Boston, Massachusetts. El puente, completado en 2003, presenta dos torres en forma de Y invertida que se asemejan a delicados instrumentos de cuerda. Su diseño elegante y moderno lo ha convertido en una estructura icónica en la ciudad.
El camino de Rosales para convertirse en un arquitecto reconocido no estuvo exento de desafíos. Después de emigrar a Estados Unidos en 1985, siguió su pasión por la infraestructura y estudió diseño urbano y medioambiental en el Instituto Tecnológico de Massachusetts. Determinado a comprender lo que hace que una gran infraestructura, Rosales viajó a Europa para estudiar puentes y proyectos importantes de obra pública.
A principios de la década de 1990, Rosales fue nombrado arquitecto principal del puente que conectaría Charlestown con West End en Boston. El diseño original del puente recibió críticas por ser un “monstruo feo”. Sin embargo, Rosales imaginó un puente elegante y moderno que transformaría el área descuidada y se adaptaría bien al entorno marino circundante.
Con la ayuda del ingeniero suizo Christian Menn, Rosales propuso un diseño de puente atirantado para el proyecto. El Puente Memorial Leonard P. Zakim Bunker Hill, con su estructura soportada por cables, se completó en 2003 y rápidamente se convirtió en uno de los hitos más icónicos de Boston.
El puente representa la tensión entre lo viejo y lo nuevo en una ciudad antigua como Boston. Representa la aceptación de la arquitectura moderna por parte de la ciudad mientras celebra sus tradiciones coloniales. Los diseños de puentes de Rosales continúan ejemplificando el poder de la infraestructura para conectar comunidades y transformar ciudades.
Fuentes:
– Artículo vinculado, no disponible
– Entrevista personal con Miguel Rosales