
Marika Dru, fundadora de Atelier MKD, se enfrentó al desafío de dar un aspecto moderno a un apartamento en París situado en una calle luminosa y lujosa. Inspirada por las grandes puertas, las ventanas amplias y los techos altos, Dru buscó crear un espacio único y atemporal, preservando a la vez su auténtico espíritu francés.
Para aprovechar al máximo los espacios más pequeños y cerrados del apartamento, Dru incorporó puertas pivotantes. Estas puertas, cuando están abiertas, se encuentran al ras de las paredes, ofreciendo un espacio habitable luminoso con una circulación fluida. Cuando están cerradas, crean espacios íntimos, permitiendo una mayor sensación de intimidad en comparación con las áreas de estar de planta abierta. Las puertas pivotantes también actúan como particiones, siendo el elemento organizativo dominante de este proyecto arquitectónico.
Tomando inspiración del Art Deco y del minimalismo, el estilo del apartamento combina mobiliario contemporáneo y referencias deliberadas a los años 30. La elección de materiales, como la madera de roble estriada en la cocina y el hormigón en el baño, añade rigidez y solidez al interior. Dru también incorporó hornacinas con curvas atractivas, y jugó con telas delicadas y tonos suaves para dar un toque más suave al apartamento.
A pesar de las decisiones deliberadas de agregar carácter y estilo al interior, Dru buscó crear un espacio atemporal y perdurable. Al seleccionar materiales duraderos y optar por una paleta de colores natural, ha logrado que el apartamento de 400 metros cuadrados sea adaptable y glamoroso. La adición de accesorios como cojines y cortinas permite cambios fáciles, permitiendo que el apartamento se adapte a las preferencias de diseño cambiantes mientras se mueve sin esfuerzo a través del tiempo.
En general, la renovación moderna de Marika Dru en este apartamento parisino lo ha transformado en un espacio habitable contemporáneo, único y adaptable, manteniendo a la vez su auténtico espíritu francés.
Fuentes:
– Atelier MKD